...Crono, tras cortar a su padre los genitales, los arrojó al mar.
De las gotas de la sangre derramada nacieron
las Erinias: Alecto, Tisífone y Megera.
APOLODORO, Biblioteca Mitológica, I 1, 4.
Las Erinias, venerables deidades vengadoras que persiguen y causan penalidades a los que comenten crímenes atroces, conocidas también como las Euménides y por los romanos como las Furias, y concebidas en la imaginación de los antiguos como infernales criaturas aladas, con serpientes por cabellos, portando látigos o antorchas.
Dedico el presente blog a estas tres bellezas, en virtud de cómo el horror y el miedo pueden servir a la justicia, y de cómo la belleza de los actos justicieros puede hacer ver la repugnancia del aspecto físico como necesaria y hasta benéfica. En efecto, un hombre espantoso y bestial es mejor candidato a repeler bribones que uno hermoso y amigable. Tal es quizás la razón por la que las monstruosas gárgolas fueron destinadas a la tarea de alejar a los espíritus malignos de los templos cristianos, pues hay que reconocer que para cumplir la función de desagüe sale sobrando su macabra apariencia.
Aprovecho para dedicar el actual blog a varias cosas más, entre ellas la sabiduría mitológica, que nos muestra las jugarretas tramposas de Eros, los caprichos de su madre Afrodita, la belleza causante de desgracias, o simplemente la oscura malicia de los dioses olímpicos. Pero ante todo, dedico con fervor este humilde blog a la repulsión y el pánico redentores del alma humana, representados fielmente en las Erinias.
2 comentarios:
lo siento me olvido mucho de tu lengua!
me gusta to blog!
newman
http://newmanfilms.blogspot.com
Suena bien, por aquí nos pasearemos con regularidad.
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